La atención médica y terapéutica puede ser preventiva, curativa o de rehabilitación, enfocada en diagnosticar, tratar y mejorar las condiciones de salud de los pacientes. Incluye consultas, terapias y seguimientos personalizados, promoviendo la recuperación y el bienestar integral.
La receta médica puede ser física o electrónica, proporcionando tratamientos farmacológicos personalizados según las necesidades del paciente. Garantiza un uso adecuado de medicamentos, optimizando la efectividad del tratamiento y previniendo complicaciones.
La investigación y educación pueden ser clínicas, científicas o comunitarias, enfocadas en avanzar en el conocimiento médico y promover prácticas saludables. Incluye estudios, capacitaciones y programas de concientización, mejorando la calidad de la atención y previniendo enfermedades a través del conocimiento.